Como hemos hablado anteriormente en varios de nuestros artículos, la patata es un alimento que contiene una larga lista de propiedades beneficiosas para el cuerpo. Además de poder prepararse de muchas maneras distintas, este tubérculo nos aporta nutrientes que resultan fundamentales para el día a día.
Todos sabemos lo importante que es tener una buena alimentación, y esto se vuelve aún más importante cuando se trata de los más pequeños. Una dieta equilibrada, que les aporte la energía y vitaminas necesarias, además de que controle la cantidad de grasas que se ingieren, es primordial para su actividad y funcionamiento diarios.
Si estas dietas no son equilibradas, pueden reflejarse en el nivel de actividad del niño (cansancio excesivo o, por el contrario, estar muy acelerado), en su estado anímico o en carencias nutricionales.
¿Por qué son importantes las patatas en la alimentación de los niños?
Gracias a sus propiedades, las patatas se convertirán en nuestras grandes aliadas a la hora de preparar los platos de los peques de la casa.
Carbohidratos
Los carbohidratos son imprescindibles para el correcto funcionamiento de los músculos y el cerebro. El aporte que obtendrán de ellas hará que dispongan de la energía necesaria para afrontar las actividades deportivas y escolares de cada jornada. Además, los carbohidratos procedentes de la patata son complejos (el tiempo en el que se transforman en glucosa es más prolongado que en el caso de los carbohidratos sencillos), esto hace que la energía se libere de forma progresiva y se eviten los picos de glucosa.
Vitamina C
Este antioxidante cuida de la salud de nuestra piel, huesos, pelo y uñas. También colabora en el proceso de cicatrización de las heridas, tan habituales en los niños.
Vitaminas del grupo B
Las vitaminas del grupo B nos ayudan a obtener la energía de aquellos alimentos que ingerimos. Por ello, un aporte correcto de estas vitaminas, conllevará un adecuado funcionamiento del metabolismo de los macronutrientes.
Algunas de estas vitaminas son el ácido fólico, que interviene en la formación de los glóbulos rojos, y la vitamina B6 o piridoxina, que lo hace en la formación de hemoglobina, además de ayudar a obtener energía de los carbohidratos y proteínas, almacenándolos en el cuerpo.
Fibra
Son muchos los niños que padecen problemas de estreñimiento. El aporte de fibra nos ayudará a solucionar este problema tan incómodo.
Minerales
Los minerales que nos aporta la patata son el potasio (bueno para los huesos, además, complementándose con el sodio, regula el agua entre el interior y el exterior de las células), el magnesio y el fósforo, fundamentales para los huesos.
Estos minerales son esenciales para las etapas de crecimiento, lo que los hace imprescindibles en las dietas de los niños y adolescentes.
Efecto saciante
Al generar una sensación de saciedad por más tiempo, nos ayudará a evitar los posibles picoteos inadecuados que se producen entre horas.
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